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jueves, 11 de abril de 2013

El verdadero Siglo XXI.

Todos sabemos que, efectivamente, estamos en el siglo XXI. Hemos crecido y avanzado como sociedad capitalista, con la implantación real de las nuevas tecnologías y de una globalización que afecta tan sutil como   radicalmente en nuestras vidas.
Digo sutilmente porque, entre otras cosas, los hilos de la sociedad son movidos por otros ajenos a nosotros mismos. Somos esa marioneta que a veces recibe duras sacudidas, y no puede hacer más que oponerse y protestar, muchas veces en vano, ante esa resistencia externa que se nos impone incondicionalmente.
Si nos vamos a otros siglos, eran los distintos países y sus gobiernos, dictatoriales, republicanos, democráticos o de cualquier otra modalidad política, los que movían esos hilos. Ellos podían cambiar el destino de una nación radicalmente siempre que pusieran el empeño necesario.
Hoy día no, los títeres somos todos, incluidos los políticos, átomos privilegiados que solo tienen capacidad de indignar medianamente a sus paisanos con medidas que a grande escala solo matizan, ya que las decisiones mayores son ordenadas por otras naciones, estructuras, o incluso organismos situados jerárquicamente en un peldaño superior del absorbente sistema capitalista actual, que muchas veces enguye a los átomos o unidades básicas  de una sociedad cada vez más inmóvil.
Si pensamos en ello: ¿Cuál es la raíz para erradicar esta determinación y liberarnos progresivamente del mercado laboral y el mundo de la economía?
La educación, no hay otra, pero... Si existe educación, todos tenemos fácil acceso a ella (siempre y cuando perdure la modalidad pública) y es la herramienta más eficaz a la hora de crear sujetos que se adapten a la sociedad.¿ Por qué existe tal anacronía, contradicción o como quiera llamarse, entre el desarrollo vertiginoso de nuestros medios y los métodos de la escuela?
Los métodos, paradójicamente, no se corresponden con la innovación material que nos rodea, son tradicionales, arcaicos, inflexibles y poco disruptivos. La escuela, por tanto, así no cumple con su función de adaptar a sus miembros, que son retenidos y custodiados gran parte de sus vidas inútilmente.
La innovación es del verdadero siglo XXI, es la herramienta, el medio eficaz que ha de usar la escuela para uno de sus mayores propósitos.
Al margen quedan los libros de texto y aquellos "sabelotodo" que se presentan en el aula con aire de superioridad y escupen ideas de diferentes áreas de conocimiento, que aún siendo de otros, hacen como suyas. Quién sino nunca ha oido: "chicos atended que es muy importante el teorema de pitágoras"  " Abrid el libro por la página... y leed.. y haced las actividades.."
No, no y no. El niño ha de saber que ese teorema está en Wikipedia, y en miles de sitios web más. El docente no tiene por qué manejar necesariamente una gran cantidad conceptos de gran complejidad, sino que ha de tener las habilidades competentes suficientes para guiar a su alumno, para que éste interactúe con la infinidad de medios de los que disponemos: cooperación, trabajo en grupo, lluvia de ideas. Un Aprendizaje Basado en Problemas , que forme sujetos críticos y capacitados en la resolución de conflictos.
En definitiva, que el miedo al fracaso ante algo nuevo, no produzca un estancamiento pedagógico y metodológico. Es cierto que la escuela tradicional se ha mostrado eficaz, pero los medios no pueden superar a los sujetos, éstos tienen que domarlos y usarlos a su favor.
Es hora de experimentar en la escuela, desde el conocimiento y la formación; con mucha cautela porque jugamos con el futuro de otros. Es la era de la tradición de la ruptura, una vez superada la ruptura de la tradición.

sábado, 6 de abril de 2013

Formación de paja, cartón o corcho. La sociedad califica y NO evalua.

Curioseando por la red, entre blogs como el de Miguel Sola (perdonen el atrevimiento) y otros de su círculo, topé con una entrada de blog, Debe ser que eres maestro o ni falta, y tras leer detenidamente sus, a mi juicio, más que correctas palabras me enervé, enojé, irrité en cierto modo (si cabe ser políticamente correcto). Más aún cuando pude observar y constatar con mis propios ojos el artículo de Pilar Álvarez en El País ("Maestros suspensos en Primaria"), ante el cuál decidi reflexionar y argumentar lo siguiente:
El título de mi entrada dice " formación de paja, cartón o corcho". Llamo así a toda formación que recibe un docente, relativa a engrosar desmesuradamente, o incluso virtuosamente  sus competencias, como dijo Nietszche en muchas de sus obras, a modo de Superhombre que supera al ser humano normal y corriente y dirige la sociedad.
Pues si eso es lo que pretendemos, adelante, pongan  desde primer curso de la carrera de Magisterio asignaturas solo formales, que aseguren a docentes que sepan decir dónde están todos los ríos de carrerilla, en orden alfabético y haciendo el pino a una mano. Y quien dice ríos dice provincias, historia, lengua, matemáticas, filosofía, ética, moral, etc.
Manden inspectores y quiten a todos aquellos profesores que no son "legales" y innovan en sus clases en vez de dar tochos teóricos y plantear clases tan intelectuales como apáticas, en las que el docente de un alarde de saberes y mira al alumno con arrogancia si éste no llega a su nivel de abstracción.
Foucoult habla de un sistema que vigila y controla a sus individuos, pero añade que éstos pueden oponer resistencia y no ser sumisos. Además control no equivale a calidad, porque puestos a ser competentes, que yo sepa no son sinónimos.
Ante esto, verifica el artículo: (...) Hasta la fecha, no es necesario aprobar todas las partes del examen para integrar la lista de interinos de la que se nutren a lo largo del curso para cubrir cualquier vacante que surja. Prima la antigüedad, con un peso del 46,8%, seguido de la nota del examen (36,01%) y de otros méritos (16,1%). La Consejería de Educación le dará la vuelta a ese baremo en un decreto que espera aprobar antes de las próximas oposiciones, previstas en verano. Su intención es reservar un 80% del resultado final a la nota y dejar reducida al mínimo la experiencia (15%) más otro 5% de otros méritos(...).
En definitiva, mayor control traducido en la mayor importancia de la calificación, tal y como se mueve la sociedad actual, calificando y prescindiendo de la evaluación racional . Lo demás no importa. Para ello no tenemos más que ver las redes sociales como juzgan, se mofan,de los actos de los demás, permitiéndose opinar sobre vidas ajenas , tal y como pude contemplar ante un Trending Topic de Twitter de hace escasos días,relativo a un vídeo difundido y protagonizado por MENORES de edad (véase este artículo ).
Concluyendo, quizá la solución no esté en desprestigiar a colectivos con titulares como el del artículo, sino en remover las conciencias individuales, y ofrecer un baremo que tenga en cuenta tanto la calificación como otros aspectos, así como de asegurar que, en el proceso de formación de un docente, hay métodos erróneos que curiosamente no se cuestionan. 
Pero la realidad es otra, hay que competir para obtener el prestigio y un rol considerado en esta sociedad, ya que calificamos en función a las estadísticas y los números, sin tener previa experiencia testimonial; la administración una vez más opta por segregar antes que por subsanar.

sábado, 23 de febrero de 2013

Una vez puestos a hablar de la LOMCE...

Bien, hablemos de  la nueva LOMCE (  no se que combinación de siglas harán en próximos proyectos, ya que, a este ritmo, vamos a acabar por agotarlas) :
El sociólogo T. Parsons, describió la sociedad americana del S.XX como aquella en la que premiaban ( y triunfaban) las capacidades y valías del individuo, es decir, la más que conocida meritocracia, muy significativa allí, y rasgo esencial de todo capitalismo puro llevado al extremo. Ahora bien, sabemos que en una meritocracia, algún valor diferente de la competitividad se antoja difícil, por tanto: ¿Qué libertdad tienen los ciudadanos? ninguna, libertad nula, ya que las estructuras están tan asumidas y aceptadas inconscientemente por el sujeto que no son capaces de parar a pensar y decir: ¿ Por qué compito? No, puesto que son seres acríticos, sumisos,y hablando pronto y mal, unos borregos que tienen las estructuras en su mente. Mirad que fácil, ni tienen que molestarse en manipular, ya que ellos mismos infunden la manipulación desde la familia, que sigue un fluir constante social tan dinámico, que ni siquiera pueden pensar qué hacen ahí.
Eso sí , la sociedad americana, era democrática, claro que sí. Una sociedad en la que tu estatus social prestigioso es tan accesible como elitista. Sí, elitista, como las numerosas dictaduras que hemos sufrido varios países en el s. XX , y digo hemos porque nuestra dictadura duró tanto o más que las otras.
Transladando esto a la nueva y maravillosa reforma, la LOMCE reduce la capacidad de decisión del sujeto, se adelantan sus decisiones, y sus cribas, con un carácter más selectivo (elitista al fin y al cabo). En tercero de ESO ya se decide quién va a bachiller y quién no es válido para ir, que a su vez este tipo de alumnos dispone de menos tiempo para demostrar lo contrario. Y no acaba ahí, ya que puestos a adelantar, la población "preferida" de los grupos ultraconservadores y fascistas también se ve afectada, ya que los "alumnos con dificultades" (gran eufemismo por cierto) tienen una posible salida que se adelanta a segundo de ESO hacia F.P. Más división social premeditada, consistente en construir desde allí arriba una estratificación que ofrezca una desigualdad social funcional (útil para el sistema) en la que las clases sociales conviven pacíficamente, sin conflicto.
Para colmo, más apoyo a las escuelas privadas, por si fuera poco ser uno de los países de la UE con mayor número. Otra vez más, desigualdad social basada en el diferente reparto de los bienes económicos en la población.
En definitiva, muchos intentos de mejorar números (déficit) a cualquier precio, de dejar de ser la cola de Europa, solo para intentar ser pioneros (élite otra vez más). En una cosa si han acertado, destruyendo la educación y su esencia, sí podrán conseguirlo. Luego se verá si poseemos un mínimo de libertad o si solo dependemos del trabajo, la economía, los números, y sobre todo, del rebaño.
http://elpais.com/tag/lomce_ley_organica_mejora_calidad_ensenanza/a/

miércoles, 20 de febrero de 2013

EPA: ¿una invención como tantas otras?

Entorno Personal de Aprendizaje, o  Personal Learning Environment, es como han querido llamar al sistema que ayuda al alumno a controlar y gestionar su propio proceso de aprendizaje. 
Para entrar en materia, no cabe duda que, entre otras cosas, la explosión reciente de las Tecnologías de la Información y de la Comunicación ha repercutido enormemente a la intercomunicación de las personas, no sólo en un ámbito local, sino también global. Ahora bien, enfocándolo a la educación, queda claro que cualquier alumno puede acceder a cualquier tipo de información de manera instantánea, y es que, al hacer click con el ratón, habiendo puesto anteriormente un simple título en google, puede acceder a cualquiera de las páginas que se le habilitan, siendo millones (solo en su idioma). 
Partiendo de esto, se nos antoja una pregunta: ¿Para qué está el profesor?
Sabemos que es meramente imposible que añada  información alguna que no sea accesible para ningún alumno por otros medios y que, por tanto, su nueva función es organizar toda esa abundante, y como no, peligrosa información  en algunos casos. 
Para un docente de Educación Primaria, este magnífico término puede resultar positivo, sin embargo, para un niño que es inconsciente, quizá no pueda resultarlo:
 El docente es el encargado de enseñar cosas que, bajo consenso general, sean moralmente irreprochables, es decir, educativas. ¿Todo lo que ofrece el entorno es educativo? obviamente la respuesta es no, ya que de por sí, mucha información de nuestro entorno no conformaría un proceso educativo, ni por asomo. 
Transladando esto a las tecnologías, toda la información que encuentre un niño de primaria en ellas, ¿es educativa? y para más hincapié, ¿De qué sirve el aprendizaje si no es educativo? 
Si profundizamos en el asunto, podemos añadir que en muchos de los casos, las fuentes de información que provienen de ellas son falsas y cuentan con escasa credibilidad (no debemos olvidar la cantidad de información errónea que nos han llegado a ofrecer  redes reconocidas).
Después de todo esto, solo puedo decir que el EPA es todo lo que se interpone en nuestro camino, desde que nos levantamos hasta que dormimos y que, en muchos de los casos ese entorno de aprendizaje es gestionado inconscientemente por el sujeto, ya que, en muchos de los casos la Sociedad manipula y controla      a sus individuos, que creen tener un entorno que ni siquiera es original, sino adquirido.
Para concluir, decir que las cosas cambian según  la perspectiva, y si tenemos una perspectiva global, el EPA es un término que abarca todo, pues el sujeto (con herramientas y medios adquiridos de la Sociedad) puede elegir en cualquier momento qué aprende qué no aprende y cómo lo gestiona en una continua relación de acción-omisión. En definitiva, una invención como tantas otras.